Existe una creciente expansión de los productos más verdes en la industria cosmética debido a las nuevas demandas de los consumidores, siendo un segmento muy atractivo para muchas empresas que desean tener ingredientes y productos diferenciadores.

Hace unos años, se enfocaba solo en las formulaciones, ahora el sentido es holístico, comprendiendo el packaging, los compromisos medioambientales, ética, responsabilidad social entre otros aspectos, dando como resultado productos cosméticos más sostenibles.

En la actualidad, no existe un reglamento o norma que indique cuando se considera un producto cosmético “natural” o “ecológico”, a diferencia de los productos alimenticios que posee un Reglamento EU que especifica los requisitos y criterios para ser considerados dentro de la producción ecológica.

Ante la ausencia de normativas que regulen estos productos en términos naturales y/o ecológicos, varias empresas del sector se han agrupado para crear certificaciones para los distintos productos cosméticos y por ende, establecer parámetros de evaluación y control. Entre los principales organismos certificadores en Europa, se encuentran Ecocert y Cosmebio en Francia, BDIH y Natrue en Alemania, Demeter y Soil Association en Reino Unido. Por tanto, para obtener algunos de los sellos de cosmética ecológica o natural, las empresas deben someterse de manera voluntaria a determinadas evaluaciones y procedimientos ante las empresas certificadoras.

Entre los principales sellos que podemos encontrar en el mercado se encuentra “COSMOS”, el cual ha sido desarrollado por ECOCERT. En promedio, los productos certificados por esta norma contienen un 99 % de ingredientes de origen natural, los demás ingredientes podrían ser de una lista restrictiva de ingredientes aprobados que están autorizados en pequeñas proporciones. Se pueden identificar dos clasificaciones dentro de esta norma, primero el “COSMOS NATURAL”, que debe cumplir con un mínimo del 95 % de ingredientes naturales y el segundo “COSMOS ORGANIC”, con un 95 % de ingredientes ecológicos y un 20 % del total del producto que debe ser ecológico para poder cumplir.

Otro sello que podemos encontrar en el mercado internacional de cosméticos es el NATRUE, el cual establece un conjunto de requisitos estrictos y transparentes para productos cosméticos naturales y orgánicos. Para que un producto pueda obtener este sello, al menos el 75% de los productos de su marca o submarca debe obtener la certificación para poder utilizar el sello. NATRUE se categoriza en dos tipos de productos, los cosméticos naturales y cosméticos ecológicos, para estos últimos como mínimo el 95 % de los ingredientes han de ser ecológicos.

En España, existe una certificación denominada BioVidaSana, promovida por la Asociación Vida Sana y bio.inspecta, bajo el control de Biocertificacion S.L., pensada para pequeñas empresas y fabricantes artesanos. Esta norma posee 3 distintas categorías, que dependerá del porcentaje de ingredientes ecológicos o naturales  que posea el producto en cuestión.

Así mismo, existen otros organismos destacados en la Unión Europea que se encargan de evaluar cosméticos más verdes, entre ellos se pueden destacar el AIAB, CCPB, ICEA (Italia), ECO Garantie, Bioforum (Bélgica) y CosmeBio (Francia).

La mayoría de las normas y asociaciones se basan en fundamentos similares como pueden ser:

  • Incluir en los productos ingredientes menos nocivos para la salud humana, la salud animal y el medio ambiente.
  • Ser transparentes en el mercado, brindar veracidad en la información que se transmite a los consumidores.
  • Aumento de porcentaje de ingredientes ecológicos y armonización de listas de ingredientes prohibidos derivados de la petroquímica.
  • Búsqueda de la responsabilidad social favoreciendo el desarrollo sustentable y el bienestar animal.
  • Gestión adecuada de residuos respetuosos con el medio ambiente.
  • Envases, etiquetas, material comercial en menos cantidades y con mejor calidad, minimizando los residuos innecesarios y maximizando la cantidad que se pueda reciclar.

Desde Kaeltia Consulting, asesoramos a las empresas nacionales e internacionales en la obtención de certificaciones más verdes para los productos cosméticos, brindando apoyo en todas las fases del proceso.

Para más información sobre nuestros servicios en cosmética:

Cosméticos

La sostenibilidad es un concepto cada vez más importante para las empresas, que buscan hacerse sostenibles no sólo por responsabilidad corporativa o medioambiental, sino también para mejorar su imagen entre un consumidor cada vez más preocupado por el medioambiente y que valora a las empresas sostenibles a la hora de comprar sus productos, o contratar sus servicios.

Muchas empresas de todo tipo y tamaño recurren hoy día a consultoras especializadas en servicios de ecodiseño como Kaeltia para adaptar sus procesos productivos, de comercialización o de gestión, y hacerlos más sostenibles. Pero ¿realmente sabemos qué es la sostenibilidad? Veamos en detalle en qué consiste este concepto, por qué es tan importante, y cómo aplicarlo a las empresas hoy día.

¿Qué es una empresa sostenible?

Definimos como empresa sostenible a aquella que tiene entre sus prioridades no sólo la economía, sino también el compromiso social o la preocupación por el medioambiente, a fin de generar no sólo un beneficio económico a corto plazo, sino también bienestar y progreso a largo plazo, sin descuidar su impacto directo e indirecto en su entorno. Una empresa sostenible medioambientalmente apuesta -entre otras medidas- por:

  • usar materiales sostenibles
  • disminuir el uso de materias primas y la generación de residuos
  • gestionar adecuadamente los residuos que genera
  • adoptar medidas de ahorro energético, y usar energía renovables
  • fomentar el reciclaje
  • minimizar el uso de combustibles fósiles y los desplazamientos

Una buena forma de acreditar que una empresa realiza prácticas sostenibles y respetuosas con su entorno es, precisamente, consiguiendo un certificado de empresa sostenible. Las normas ISO son una buena forma de garantizar que sociedades y organizaciones cumplen determinados estándares, también de sostenibilidad.

Así ocurre por ejemplo con el certificado ISO 14001, que establece sistemas de gestión ambiental en las empresas y es uno de los más demandados actualmente, ya que ayuda a lograr un uso más eficiente de los recursos mejorando tanto la rentabilidad como la imagen corporativa. También destaca el ISO 5001, que fomenta un uso más eficiente de la energía.

¿Qué ventajas aporta la sostenibilidad a las empresas?

Por mucho que la sostenibilidad sea una demanda de los consumidores, desde el punto de vista del empresario es lógico preguntarse qué ventajas tiene ser una empresa sostenible, sobre todo teniendo en cuenta que, a corto o medio plazo, lograrlo puede requerir una inversión que, obviamente, se espera poder amortizar.

Lo cierto es que la sostenibilidad por sí sola no sólo aporta una imagen corporativa y de marca que el consumidor valora y demanda, sino que además, por sí solo, este concepto redunda en una serie de beneficios -más allá de los medioambientales- cuando se implementa en las empresas:

  • incrementa la productividad
  • reduce los costes de operatividad
  • mejora la competitividad
  • aumenta el atractivo para posibles inversores
  • mejora la imagen ante accionistas y consumidores
  • permite acogerse a beneficios fiscales

Prueba de las numerosas ventajas que ofrece la aplicación de criterios de sostenibilidad a las empresas, es que cada vez más las grandes compañías lo consideran un factor clave para su futuro. Según estudios, más del 80% de los ejecutivos de las principales empresas creen que seguir una estrategia de sostenibilidad es fundamental para garantizar la competitividad de su negocio hoy o en un futuro cercano.

Ejemplos de empresas sostenibles en España

Prueba de lo que acabamos de decir, es que cada vez más compañías de renombre apuestan por la sostenibilidad como clave para su viabilidad presente y futura. Veamos algunos ejemplos de empresas sostenibles en España:

Esveva:

Esveva es una empresa española que se dedica a la fabricación de esponjas vegetales de luffa a través de un proceso 100% artesanal, con las que se puede desde cuidar la piel hasta realizar la limpieza doméstica de forma totalmente respetuosa con el medioambiente.

La Flor de Limón:

Gracias a su producción 100% ecológica, los limones de Novales (Cantabria) presumen de tener un sabor único y de ser un producto que marca la diferencia, al contar con una piel gruesa y carnosa que hace que se mantengan en buen estado durante más tiempo.

Eco Basics:

Esta empresa con sede en Girona promueve formas de alimentación ecológica, certificada y empleando envases con ecodiseño, apostando además por incorporar productos orgánicos a la dieta diaria para mejorar la salud y el bienestar.

Naturbrush:

Naturbrush es una empresa española que, bajo la premisa de convertir gestos cotidianos en gestos sostenibles, se centra en la fabricación de cepillos dentales biodegradables hechos a base de madera de bambú, para reducir así su impacto medioambiental. La idea, afirman, surgió en respuesta al preocupante problema de la acumulación de residuos plásticos en nuestros océanos.

Souji:

Esta empresa asegura haber creado un producto revolucionario e innovador que transforma el aceite usado de la cocina en un práctico limpiador multiusos. Para ello utiliza además un recipiente sostenible fabricado a base de papel y restos de periódicos reciclados.

¿Qué hacer para que una empresa sea sostenible?

Son muchas las acciones sostenibles que las empresas pueden llevar a cabo para aplicar criterios de sostenibilidad y mejorar su imagen corporativa y de marca; algunos ejemplos que son relativamente sencillos de implementar:

  • Reducir el consumo de papel: se puede apostar por los formatos y documentos digitales, y limitar la impresión en papel sólo a casos estrictamente necesarios.
  • Ahorrar energía: fomentando hábitos tan simples como apagar las luces o equipos que no se usen, ajustar la climatización, aprovechar al máximo la luz natural…
  • Educación ambiental: la formación ambiental a los empleados es cada vez más importante para crear concienciación ecológica y cambiar hábitos.
  • Reciclar, Reducir, Reutilizar: la cantidad de residuos que genera una empresa puede ser enorme, de ahí la necesidad de fomentar las famosas 3 R.
  • Buscar proveedores sostenibles: apostar por proveedores también comprometidos con la sostenibilidad, o que sean de proximidad, puede suponer un gran cambio.
  • Aplicar el ecodiseño: es decir, diseñar productos ambientalmente respetuosos desde su producción hasta el fin de su vida útil.
  • Usar transporte sostenible: fomentar el uso de car-sharing o medios de transporte no contaminantes: bicicletas, patinetes eléctricos, transporte público, etc.
  • Concienciación: crear campañas de concienciación medioambiental entre los clientes contribuye notablemente a mejorar la imagen corporativa pública.
  • Ayudar: las empresas pueden colaborar económicamente -o incluso de otras maneras- con ONGs que realicen acciones de cuidado del medioambiente, por ejemplo.

Lo más importante a la hora de implementar estas y otras políticas es adoptar los valores de una empresa sostenible como propios, para que no se conviertan en cambios puntuales o limitados a acciones de cara al público, ya que la mayoría de clientes cuentan con la formación y la concienciación suficiente para ser capaces de identificar cuándo una empresa realmente está comprometida con la sostenibilidad, y cuándo trata únicamente de hacer un “lavado de cara” que no se traduce en cambios verdaderos, algo que el consumidor medio acaba penalizando.

En cualquier caso, es importante reseñar de nuevo que la sostenibilidad va mucho más allá del respeto al entorno y el medioambiente, y que es toda una filosofía que aporta numerosos beneficios a las empresas, los cuales no se limitan únicamente a la imagen corporativa sino que incluyen desde la eficiencia en el uso de recursos hasta el ahorro de costes. Es por eso que cada vez más firmas que quieren ser empresas sostenibles recurren a consultoras como Kaeltia, que ofrece servicios de asesoramiento y consultoría a medida para las empresas que buscan cambiar sus productos o servicios mediante prácticas sostenibles como el ecodiseño.

Gracias a la concienciación ambiental, cada vez más consumidores y empresas tienen en cuenta sus decisiones y el impacto que pueden generar sobre el medioambiente. Hoy en día, es muy común escuchar términos como “sostenibilidad”, “economía circular” o “productos sostenibles”. Estos conceptos ecofriendly están íntimamente conectados, pero solo este tipo de productos pone en práctica ese compromiso ambiental. A continuación, te explicamos en detalle qué son los productos sostenibles y cuáles ayudan a cuidar el medioambiente.

¿Qué es un producto sostenible?

Los productos sostenibles son aquellos que se elaboran respetando el medioambiente y teniendo en cuenta su huella ecológica. Se fabrican a través de procesos limpios no contaminantes, optimizando los recursos empleados o usando energías renovables. Por tanto, gracias a este enfoque práctico, los productos pueden perdurar en el tiempo sin perjudicar el futuro de las siguientes generaciones.

Más que una ‘moda’ pasajera, este tipo de productos duraderos y amigables con el medioambiente representan un cambio de paradigma tanto en nuestra forma de producir como de consumir productos. La sostenibilidad nos hace tomar conciencia de la necesidad de alterar muchos de los hábitos perjudiciales que tenemos interiorizados. De hecho, lograr un estilo de vida más ecofriendly no implica un gran sacrificio; con tan solo adoptar una mentalidad más sostenible, ya estaremos respetando y protegiendo a nuestro entorno. Así que a continuación vamos a mostrar cuatro productos con diseños sostenibles que invitan a apostar por un mundo más verde.

Ejemplos de productos con diseños sostenibles que debes conocer

El packaging sostenible esta pensado para proteger el medio ambiente de los residuos que generamos con los envases. Esta metodología se basa en la economía circular, la cual implica reducir, reciclar y reutilizar materias primas todas las veces posible. Por eso, a continuación proponemos cuatro ejemplos de diseños sostenibles a tener en cuenta para distintos tipos de negocio.

Embalajes ecológicos para cosmética

El sector de la belleza es responsable de una gran cantidad de desperdicio y consumo de plásticos y otros materiales, especialmente en sus envases de cremas, champús y maquillaje. Por lo tanto, es crucial considerar el uso de materiales sostenibles al diseñar el packaging de estos productos. Una recomendación es reemplazar los envases de plástico por envases de vidrio (si es posible retornable) y utilizar embalajes de material sostenible, entre otras medidas.

Packaging sostenible en alimentación

El uso de packaging sostenible en el sector de la alimentación, especialmente en los envases de comida para llevar y los productos adquiridos en supermercados, desempeña un papel crucial en la preservación de nuestra salud y del medio ambiente. Al reemplazar el plástico por materiales biodegradables, se logra reducir al mínimo los efectos negativos derivados de la generación y gestión de residuos así como la ingesta de microplásticos, un tema sanitario de creciente preocupación en la salud humana. Además, esta práctica está alineada con los principios de la economía circular contemplados en nuestra legislación, como la Ley de residuos y suelos contaminados para una economía circular, que transpone a nuestro ordenamiento jurídico lo previsto en la Directiva de la Unión Europea.

Cubiertos reutilizables

En el mercado actual existen diversas opciones de cubiertos reutilizables que son respetuosas con el medio ambiente y evitan el uso del plástico de un solo uso. Una vez más, es conveniente adaptar nuestros negocios a la normativa vigente, además de desalentar el uso innecesario de plástico. Una gran opción, como ejemplo de productos sostenibles, son los cubiertos biodegradables capaz de desintegrarse fácilmente en el medio ambiente sin generar inconvenientes futuros. Estos cubiertos se destacan por ser económicos y a la vez que innovadores.

Diseño de envoltorios multiusos

El diseño de envoltorios multiusos busca maximizar la utilidad de los materiales utilizados en el embalaje de productos. Consiste en diseñar el envoltorio de manera que pueda tener una segunda función o ser reutilizado después de su finalidad inicial. Por ejemplo, un envoltorio para doble uso podría ser una bolsa de tela que además de proteger el producto principal durante su transporte, pueda ser utilizada posteriormente como una bolsa de compras reutilizable.

Beneficios para el planeta: ventajas de comprar y producir productos sostenibles

Ahora que tenemos en mente algunos ejemplos de los productos sostenibles, vamos a analizar los beneficios que supone el consumo y producción de los mismos:

  • Son desechables y no contienen toxinas ni químicos que sean nocivos para el entorno. Al ser productos biodegradables, se descomponen fácilmente en la naturaleza, al contrario que los productos basados en plástico.
  • Reducen la huella de carbono gracias a sus procesos limpios y no contaminantes.
  • Se optimizan los recursos y la energía empleados para producirlos. De esta manera, se ayuda a reducir el consumo abusivo de materias primas.
  • Son versátiles y se pueden reutilizar y reciclar, lo que permite aumentar la vida útil de los productos y reducir en el uso de nuevos materiales contaminantes.

En resumen, adoptar un estilo de vida que respete el medio ambiente a través del consumo de productos más sostenibles conlleva múltiples ventajas para nuestro entorno. Además, desde un punto de vista corporativo, las empresas que contaminan o no respetan el medio ambiente generan una imagen negativa. A continuación, explicamos la importancia de la responsabilidad social corporativa.

La sostenibilidad como ventaja competitiva: ¿Por qué apostar por una marca sostenible?

Actualmente, la implementación de prácticas sostenibles en una empresa genera múltiples beneficios que son altamente valorados por los consumidores. Por esta razón, si desarrollamos una sostenibilidad corporativa sólida, generaremos confianza y una buena imagen de marca, además de aportar valor a la sociedad. Además de algunas prácticas sostenibles fácilmente incorporables en una empresa, también existen otras ventajas de las que tu negocio podría beneficiarse:

  • Reducción de costes: implementar acciones como reducir el gasto energético, el consumo de papel o la producción de residuos, entre otros, conlleva una reducción de gastos.
  • Captación de clientes: existe una creciente preferencia por proyectos comprometidos con el medioambiente, como es la fabricación de productos sostenibles. La conciencia ecológica influye en las decisiones de compra de muchos consumidores, quienes valoran los negocios no solo por lo que hacen u ofrecen, sino también por lo que representan.
  • Beneficios fiscales: en la legislación actual, se promueve el desarrollo de prácticas sostenibles mediante incentivos que benefician a las empresas que cumplen con los objetivos de sostenibilidad empresarial.
  • Futuro a largo plazo: una marca que se compromete con la sostenibilidad en su entorno asegura de manera más sólida su proyección a largo plazo. Esto fortalece su posicionamiento en el mercado y aumenta su capacidad de adaptación al cambio.

Paso a paso hacia la sostenibilidad: ¿Cómo crear una marca comprometida con el medio ambiente?

Según datos del estudio internacional Green Response Report 2021, España es uno de los países más concienciados con la importancia de implementar prácticas sostenibles que reduzcan el calentamiento global. Esto es solo una muestra de cómo la optimización de recursos sostenibles y la conciencia de la economía circular no solo benefician al planeta, sino también a tu negocio.

Por eso, en Kaeltia apostamos por la sostenibilidad de los productos y por crear empresas más verdes. Con un equipo altamente cualificado, nuestro objetivo es asesorar empresas que pretenden realizar mejoras en sus productos y/o servicios mediante el ecodiseño y adaptarse a legislaciones a través de la economía circular, todo ello desde un punto de vista holístico e integrador. ¡Apuesta por un futuro más verde con nosotros!